Lecturas del jueves, 14ª semana del tiempo ordinario, ciclo B

Pastoral: 
Litúrgica
Date: 
Jue, 2015-07-09

I. Contemplamos la Palabra

Primera lectura: Génesis 44, 18-21. 23b-29; 45, 1-5

En aquellos días, Judá se acercó a José y le dijo: «Permite a tu siervo hablar en presencia de su señor; no se enfade mi señor conmigo, pues eres como el Faraón. Mi señor interrogó a sus siervos: "¿Tenéis padre o algún hermano?", y respondimos a mi señor: "Tenemos un padre anciano y un hijo pequeño que le ha nacido en la vejez; un hermano suyo murió, y sólo le queda éste de aquella mujer; su padre lo adora." Tú dijiste: "Traédmelo para que lo conozca. Si no baja vuestro hermano menor con vosotros, no volveréis a verme." Cuando subimos a casa de tu siervo, nuestro padre, le contamos todas las palabras de mi señor; y nuestro padre nos dijo: "Volved a comprar unos pocos víveres." Le dijimos: "No podemos bajar si no viene nuestro hermano menor con nosotros"; él replicó: "Sabéis que mi mujer me dio dos hijos: uno se apartó de mí, y pienso que lo ha despedazado una fiera, pues no he vuelto a verlo; si arrancáis también a éste de mi presencia y le sucede una desgracia, daréis con mis canas, de pena, en el sepulcro."»
José no pudo contenerse en presencia de su corte y ordenó: «Salid todos de mi presencia.»
Y no había nadie cuando se dio a conocer a sus hermanos. Rompió a llorar fuerte, de modo que los egipcios lo oyeron, y la noticia llegó a casa del Faraón.
José dijo a sus hermanos: «Yo soy José; ¿vive todavía mi padre?»
Sus hermanos se quedaron sin respuesta del espanto.
José dijo a sus hermanos: «Acercaos a mí.»
Se acercaron, y les repitió: «Yo soy José, vuestro hermano, el que vendisteis a los egipcios. Pero ahora no os preocupéis, ni os pese el haberme vendido aquí; para salvación me envió Dios delante de vosotros.»

Sal 104,16-17.18-19.20-21 R/. Recordad las maravillas que hizo el Señor

Llamó al hambre sobre aquella tierra:
cortando el sustento de pan;
por delante había enviado a un hombre,
a José, vendido como esclavo. R/.

Le trabaron los pies con grillos,
le metieron el cuello en la argolla,
hasta que se cumplió su predicción,
y la palabra del Señor lo acreditó. R/.

El rey lo mandó desatar,
el Señor de pueblos le abrió la prisión,
lo nombró administrador de su casa,
señor de todas sus posesiones. R/.

Lectura del santo evangelio según san Mateo 10,7-15:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «ld y proclamad que el reino de los cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, echad demonios. Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis. No llevéis en la faja oro, plata ni calderilla; ni tampoco alforja para el camino, ni túnica de repuesto, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento. Cuando entréis en un pueblo o aldea, averiguad quién hay allí de confianza y quedaos en su casa hasta que os vayáis. Al entrar en una casa, saludad; si la casa se lo merece, la paz que le deseáis vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz volverá a vosotros. Si alguno no os recibe o no os escucha, al salir de su casa o del pueblo, sacudid el polvo de los pies. Os aseguro que el día del juicio les será más llevadero a Sodoma y Gomorra que a aquel pueblo.»

II. Compartimos la Palabra

Para salvar vidas me envío Dios...

El texto que nos presenta hoy la lectura del Génesis narra una parte del diálogo entre José, -el hijo preferido de su padre Jacob- y sus hermanos; el diálogo sin embargo transcurre sin que exista un reconocimiento por parte de los hermanos. Hace mucho tiempo que el camino de sus vidas se separó bruscamente y con trazos de violencia por parte de los hermanos. Hoy están frente a frente, han cambiado enormemente y no sólo en lo físico. Están en posición sociológica de “señor” y siervos. La posición es tal, que pueden ser encarcelados o salvados.

José, desde un punto de vista humano puede tener motivos suficientes de revancha, -fue odiado y vendido por sus hermanos-, pero desde una humanidad salvada puede tener también la grandeza del perdón.

Podríamos decir que José tiene muchas de las actitudes que necesita un buen acompañante que desea y se presta para ayudar y ver crecer a otro ser humano. Tenía la convicción de que Dios estaba con él, y esta convicción le ayuda a sobre llevar las pruebas por las que ha pasado su vida. No siempre necesitamos tener todos los “porqués” resueltos o contestados para poder continuar, las respuestas de José han tomado muchos años en ser contestadas, es el momento de practicarlas. Se apresta a acompañar el proceso de hacer “verdad” en la vida de sus propios hermanos. Dios tiene un plan y un propósito, tanto para José como para sus hermanos que necesitan ser recatados. Es la fe de José en Dios que le permitió el perdonar a sus hermanos, y es la misma fe que al verlos de rodillas ante él le hace descubre el plan de Dios para él, ”no os pese mal, ni os dé enojo el haberme vendido acá, pues para salvar vidas me envío Dios delante de vosotros.” (45,5).

Podemos ver que la clave del éxito de José en cada situación y en cada circunstancia, en adversidad o prosperidad.... la clave fue su fidelidad a Dios. Puede leer toda su historia en esta afirmación que nos dice San Pablo en la carta a los cristianos de Roma “sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman”¡qué sabiduría tan grande ha adquirido José para hablar como habló a sus hermanos! Y ¡qué misericordia tan grande la de nuestro Dios para hacer camino a nuestro lado! Ojalá nos surjan deseos y compromiso de tener una “mirada” lúcida y compasiva para descubrir el paso de Dios por esta sociedad concreta de julio del 2015.

“ Gratis accepistis, gratis date”

Hoy el evangelio de San Mateo nos hace ver la 2ª parte de las instrucciones concretas de cómo realizar la misión. Generalmente somos mas tentados, tentadas a explicar y quedarnos con los “no-es” que también nos presenta el texto, que con las actitudes positivas que deben estar en nuestro propio ser . Hoy te invito a que ores con lo que me parece es el objetivo de la misión: revelar la presencia del Reino. “Id y anunciad: El Reino de los Cielos está cerca”.(v.7) El objetivo principal es anunciar la proximidad del Reino. Aquí está la novedad traída por Jesús. Y esta novedad, Él la percibe, la revela y la entrega gratuitamente a sus discípulos..

La frase con la que encabezo esta parte, está en mi memoria como uno de los misterios gozosos de mi vida, al que vuelvo continuamente. La perícopa entera hizo parte del primer retiro de mi vida religiosa en el noviciado. Jesús centra el núcleo de su mandato en cinco frases positivas que parece hacen parte del ser discípulo-evangelizador : proclamen, curen, resuciten, purifiquen, expulsen..... ¿cómo puede mandar esto si el discípulo carece de ello?. El ser humano por si solo no lo tiene. Si Jesús les encomienda esto es porque antes se lo ha entregado. He aquí la frase que traslada la responsabilidad a los discípulos y con ellos a toda persona que ha sentido el llamado del Maestro y ha respondido. “Gratis lo recibisteis, dadlo gratis”.

El retiro que he mencionado y el texto no le aplicaba a la misión como tal, le aplicó a la forma de servicio en la comunidad y vida fraterna, y ha sido fundamental y exigente en mi vida. Pero también es muy liberador, si yo lo he recibido, y creo que sí, nunca me faltara el ser sostenida por Él. Si caigo o dejo de realizar “esta obra” se debe más a mi debilidad, pereza, negligencia o descuido.... que a la excusa de no ser capaz, de no poder.... La frase que late y está en mi memoria era un poco modificada y era así : gratis lo has recibido, date gratuitamente.

Creo que, en lo esencial, nada ha cambiado: El mensaje liberador sigue siendo para toda persona, aunque lo primordial para Jesús, fue su opción por los excluidos de su tiempo, las viudas, los enfermos, los impuros, los pobres en general. Si Jesús estuviera entre nosotros hoy, ¿qué recomendaciones entregaría a los cristianos encargados de difundir la Buena Noticia? ¿hablaría en otros términos ? ¿Qué y cómo resuena en ti esta instrucción de Jesús? ¿Crees la gratuidad está inserta en nuestro vivir cotidiano?

Hna. Virgilia León Garrido O.P.
Congregación Romana de Santo Domingo