La Eucaristía, acción de gracias por la creación

de Rogelio Cabrera López
Arzobispo de Monterrey

COMUNICADO DE PRENSA

30 de agosto de 2015

Con gran alegría nos uniremos al Papa Francisco en la I Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, que se realizará el martes 1º de septiembre, y cuya finalidad es invitarnos a vivir la vocación de ser protectores de la obra de Dios, y al mismo tiempo dar testimonio de comunión con los hermanos ortodoxos, quienes desde hace tiempo celebran un Jornada similar.

Invito a todos para que este 1º de septiembre, en sus parroquias, nos unamos en la Eucaristía, la acción de gracias por excelencia, para elevar nuestra gratitud a Dios por confiarnos el cuidado de todo lo creado. Asimismo, quienes puedan hacerlo, les recomiendo buscar un espacio en su trabajo para invitar a sus compañeros y realizar una oración por nuestro planeta.

Un servidor presidirá esta Jornada en la Parroquia de N. Sra. de los Remedios, en la colonia Puerta del Sol, en Santa Catarina, N.L., celebrando la Santa Misa a las 7:00 p.m., en donde también bendeciré 100 árboles que entregaremos a las familias de la comunidad, como un signo de responsabilidad en el cuidado del medio ambiente.

De la misma forma, deseo recordar a la comunidad la proximidad del VI Congreso Eucarístico Nacional, que realizaremos en nuestra ciudad del 9 al 13 de septiembre. Para los cristianos, “la Eucaristía es un sacrificio de acción de gracias al Padre, una bendición por la cual la Iglesia expresa su reconocimiento a Dios por todos sus beneficios, por todo lo que ha realizado mediante la creación, la redención y la santificación” (Catecismo de la Iglesia 1360).

Por lo que este Congreso, será una manifestación de gratitud a Dios, una expresión comunitaria de fe y unidad como Iglesia, en donde también reflexionaremos muchos aspectos de la vida en comunión que debemos vivir los cristianos y la forma de hacerlos tangibles en la sociedad.

Para nuestra Arquidiócesis es una bendición esta magna celebración, por lo que invito a todos los fieles para que se den la oportunidad de vivir estos días que, estoy seguro, fortalecerán la fe y el compromiso para lograr una mejor relación entre todos.

Como Iglesia de Monterrey, buscando extender la vivencia de este Congreso, hemos fortalecido el deber de seguir haciendo vida la Eucaristía en el servicio a los más necesitados, creado un Centro Comunitario en la Capilla San Juan Diego, ubicada en la colonia Las Lomas, en el municipio de Juárez, N.L., en donde ya estamos impartiendo cursos de Desarrollo Humano, a la par de actividades que promuevan la integración y el sano desarrollo de las familias.

Con la ayuda de Dios, deseamos seguir haciendo crecer este tipo de acciones, mismas que fortalecerán los lazos de fraternidad al poner al servicio de nuestro prójimo los dones que gratuitamente hemos recibido.