2012-05-22 Radio Vaticana
(RV).- Benedicto XVI agradece la cercanía y amistad del Colegio Cardenalicio en su ministerio de Sucesor de Pedro y las felicitaciones por su cumpleaños y aniversario de pontificado, en un almuerzo, el lunes, con los purpurados, en la Sala Ducal del Palacio Apostólico Vaticano. Con profunda emoción y cordialidad, el Papa agradeció a los «queridos hermanos», del Colegio Cardenalicio, encabezados por el Cardenal decano, Angelo Sodano, las felicitaciones - que recibió con motivo de su ochenta y cinco cumpleaños, el pasado, 16 de abril, y del séptimo aniversario de su elección como Pontífice, el 19 de abril.
El Santo Padre elevó, en primer lugar, su acción de gracias al Señor:
«Agradecimiento, ante todo, al Señor por los años que me ha concedido, con tantos días de alegría y momentos estupendos, pero también con noches, que a pesar de ser oscuras, luego, en retrospectiva, se comprende que también las noches eran necesarias y buenas y motivo de agradecimiento».
Benedicto XVI hizo hincapié en el compromiso de la Iglesia – ecclesia militans - en favor de la verdad, para impulsar la derrota del mal que quiere dominar el mundo:
«Vemos cómo el mal quiere dominar el mundo y cuán necesario es luchar contra el mal, que asume tantas formas de violencia y algunas veces se confunde con el bien, para destruir los cimientos morales de la sociedad».
Benedicto XVI, evocó a san Agustín y destacó que en la lucha entre los dos amores - que son el de sí mismos hasta el desprecio de Dios y el del amor a Dios, hasta el desprecio de sí mismos, en el martirio - es muy importante poder contar con los amigos:
«Nosotros estamos en esta lucha, en la cual es muy importante tener amigos. Y en lo que a mí se refiere, yo estoy rodeado de los amigos del Colegio Cardenalicio: son mis amigos y me siento en casa, me siento seguro en esta compañía de grandes amigos, que están conmigo y así estamos todos juntos con el Señor».
Amistad y comunión, en las alegrías y en las dificultades – reiteró el Santo Padre a los amigos del Colegio cardenalicio- confiando en el aliento que da el Señor:
«¡Gracias por vuestra comunión en las alegrías y en los dolores! Vayamos adelante, el Señor nos ha dicho: ‘tengan valor: yo he vencido al mundo’. Estamos en el ‘equipo’ del Señor, es decir en el equipo victorioso ¡Gracias a todos!».
(CdM - RV)