El día 6 de junio de 1862 fueron muertos a causa de su fe cristiana los santos Pedro Dung y Pedro Thuan, en Lung-Mi, y Vicente Duong, en Doang-Trung-Mi-Nhue. Los tres fueron canonizados el 19 de junio de 1988.
Los dos primeros eran pescadores, y tras su arresto padecieron un período de cárcel en Lung-Mi. Pese a la insistencia de las autoridades, se negaron a pisotear la cruz y apostatar. Encerrados en cabañas de paja, fueron quemados vivos en ellas.
Pedro Dung era natural de Dong-Phu, estaba casado y tenía varios hijos, y era un excelente padre de familia. Cargado ya con la canga tras su arresto, logró que lo llevaran a la puerta de su casa, se despidió de su familia y pidió que todos perseveraran en la fe.
Pedro Thuan, amigo y paisano del anterior, había sido anteriormente arrestado varias veces y se había librado de las represalias porque pisó la cruz. Pero se arrepintió y volvió al ejercicio de su religión, lo que le valió un último arresto y el paso por varias cárceles, hasta que habiendo confesado la fe, esta vez sin titubeo, fue quemado vivo.
Vicente Duong era también padre de familia, de profesión agricultor. Arrestado por su fe, la confesó abiertamente, y no cediendo a ninguna amenaza, por ella fue quemado vivo.