SINODO: LA IGLESIA EN LAS LLAMAS DEL ESPIRITU SANTO

(RV).- Las parroquias, las pequeñas comunidades, las escuelas, las peregrinaciones, los catequistas, el papel sacerdotes y laicos y de manera especial la familia. Son los temas de las relaciones conclusivas del Sínodo sobre la Nueva evangelización que centraron ayer la Conferencia de prensa de los presidentes delegados, haciendo balance de la primera fase de la Asamblea sinodal, que hoy ha proseguido sus debates en la decimoséptima congregación.

“Para describir en una sola palabra o una imagen lo que sucede en el Sínodo, puedo decir que la Iglesia está en las llamas del Espíritu Santo."

Son palabras de su Beatitud Sviatoslav Schevchuk, jefe de la Iglesia greco-católica ucraniana hablando de la vivacidad y diversidad del mundo católico congregado en Roma. Obispos de todo el mundo que se encuentran invitados por Benedicto XVI y hablan con entusiasmo del Año de la fe y de los desafíos de la Nueva evangelización. El cardenal John Ton Hon obispo de Hong Kong (China) subraya la importancia de los catequistas. Y el cardenal congoleño Laurent Monsengwo Pasinya, arzobispo de Kinshasa, afirma que “nuevos deben ser el ardor, el método y la expresión en un mundo en el que muchos no creen”

"¿Cómo podemos hablar de Dios, de Jesucristo, en un mundo que ya no cree, y que no se cuestiona sobre Dios o se hace esta pregunta mal?"

El arzobispo eslovaco Mons. Ján BABJAK, Metropolita di Prešov para los católicos de rito bizantino habla de los lugares de peregrinación, con una recomendación

“En los lugares de peregrinación, hay que poner los sacerdotes más preparados y maduros, aquellos que aman a Dios y a los hombres que son llamados a servirlos, especialmente a través de las Confesiones, la escucha y la discusión sobre sus problemas."

“It’ just wonderful to be part…"

Y éstas son palabras de Mons. José Horacio Gómez, arzobispo de Los Ángeles, que confía en lo extraordinario que es para él, por primera vez en el Sínodo, encontrarse con una Iglesia que reflexiona, analiza y pone de relieve, la importancia del papel de los laicos.
Y del laicado y la parroquia habló en particular, el Arzobispo Schevchuk:

“La parroquia es el lugar donde hoy la iglesia puede ayudar a las familias a transmitir la fe cristiana a las nuevas generaciones y lo es porque la fe puede ser transmitida sólo por los creyentes que la viven. La parroquia es el lugar de encuentro con Cristo vivo, resucitado, presente en la Iglesia".

El presidente delegado cardenal Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara habló de los movimientos y la obediencia al obispo.

"Hay muchos nuevos movimientos entre nosotros. Por supuesto, es necesario poner un poco de orden, porque de lo contrario todo el mundo empieza a hacer lo que quiere y hay desorden en la casa. Normalmente, los obispos están abiertos, los nuevos movimientos hacen su trabajo sin dificultad, pero de vez en cuando hay alguien que quiere imponerse al obispo….Cada uno haga su trabajo y entonces las cosas irán bien".

Todos buscan el camino de la verdad y belleza de la fe. Es necesario encontrar este camino para acercarnos de nuevo a Jesús. (ER - RV)