DIOS NOS BENDICE CON SU PLAN DE AMOR

2012-12-05 Radio Vaticana
(RV).- Dios nos bendice con su plan de amor. Es el misterio escondido y manifestado en Cristo. Don gratuito de su amor que nos recibe y transforma.

El acto de fe es la respuesta del hombre. Implica una conversión, un cambio de mentalidad en la que él da pleno sentido a nuestra existencia.

Queridos hermanos y hermanas:

La oración de bendición que el apóstol Pablo eleva a Dios Padre, en la carta a los Efesios, nos introduce a vivir el tiempo de Adviento, en el contexto del Año de la fe. El tema de este himno de alabanza es el plan de Dios para el hombre, definido con términos de gozo, asombro y agradecimiento, como un “designio benevolente” de misericordia y amor. El apóstol eleva esta bendición a Dios porque ve su obrar en la historia de salvación, cuyo culmen ha sido la encarnación, muerte y resurrección de Jesús, y comprende cómo el Padre nos ha elegido antes de la creación del mundo para ser sus hijos adoptivos, en su Hijo Unigénito, Jesucristo. El “plan de amor” es definido como “el misterio” de la voluntad divina, escondido y manifestado en Cristo. Dicha iniciativa precede toda respuesta humana, es un don gratuito de su amor que nos acoge y transforma. El acto de fe es la respuesta del hombre a la Revelación de Dios. Todo esto conduce a una “conversión”, a un cambio de mentalidad, porque Dios que se ha revelado en Cristo, nos atrae hacia Él, dando pleno sentido a nuestra existencia, siendo la roca sobre la que se encuentra estabilidad.

Saludo a los peregrinos de lengua española, en particular a los grupos provenientes de España, México y otros países latinoamericanos. Invito a todos a ser signo de la acción de Dios en el mundo por medio de la fe, la esperanza, la caridad. El Señor quiere siempre hacer resplandecer nuevamente su luz en la noche. Muchas gracias.

(jesuita Guillermo Ortiz - RV).

Saludos del Papa en distintas lenguas

En sus habituales saludos al final de la Audiencia General, el Papa dando la bienvenida a los peregrinos francófonos, ha subrayado que “el Adviento nos invita a renovar nuestra convicción de que Dios está siempre presente en nuestras vidas. ¡No tengan miedo a dejarse guiar por su Palabra y los Sacramentos! Dios es la roca que nos da la estabilidad necesaria para mantenernos siempre en pie”.

Hablando en inglés el Pontífice ha abierto sus brazos a un grupo de peregrinos de la archidiócesis de Milwaukee. Y ha saludo también a los visitantes anglicanos del Colegio Ardingly. “Doy las gracias - ha afirmado el Papa- al coro por la alabanza que dan a Dios con sus voces. A todos los peregrinos de habla Inglesa, incluidos los grupos de Australia y los Estados Unidos de América, invoco las bendiciones divinas de alegría y de paz”.

Dando la bienvenida a los peregrinos polacos, Benedicto XVI ha señalado que “el Adviento nos invita a renovar la seguridad de que Dios está presente en medio de nosotros: Él ha entrado en el mundo, haciéndose hombre, para llevar a la plenitud su designio de amor. Y nosotros, a través de nuestra fe, nuestra esperanza y nuestra caridad, podemos ser testigos de su presencia ante el mundo”.

Finalmente el Santo Padre, saludando en italiano, se ha dirigido a los participantes en la peregrinación promovida por las Hijas de Nuestra Señora de la ocasión de la beatificación de Sor María Crescencia Pérez, y les ha animado a seguir con fidelidad y alegría su servicio al Evangelio y a los hermanos, en el ejemplo de la nueva Beata.

Por último, como es habitual el Santo Padre ha saludo a los jóvenes, enfermos y recién casados​​. “El tiempo de Adviento, que acaba de empezar -ha dicho- toma la luz brillante del ejemplo de la Virgen Inmaculada. Que ella les impulse, queridos jóvenes, en su camino de adhesión a Cristo. Para ustedes, queridos enfermos, que María sea el apoyo para una esperanza renovada. Y sea guía para ustedes, queridos recién casados​​, para construir su familia”.
(ER – RV)