Etimológicamente significa "antigua". Viene de la lengua latina.
Pertenece al primer siglo de nuestra era cristiana. También se le llama santa Priscila. Desde muy antiguo se le tributó culto en Roma a esta joven romana.
En el siglo IX, mediante las excavaciones arqueológicas, se descubrió e identificó que estaba enterrada en Aventine con el nombre de Priscila, mujer de Aquila, un judío cristiano.
Esto consta en los Hechos de los Apóstoles y en la carta de san Pablo a los Romanos:<< Saludad a Prisca y a Aquila, mis cooperadores en Cristo Jesús, los cuales para salvar mi vida expusieron su cabeza>>.
Existe en Roma la bella iglesia de santa Prisca que, a su vez, se construyó sobre el santuario de Mitra, dios pagano.
Según las Actas, escritas en el siglo X, cuando hablan de ella, dicen que era una chica adolescente que la llevaron al anfiteatro para la diversión de la gente.
Se lanzó sobre ella un león y, en lugar de hacerla pedazos, se echó sus pies. En vistas de esta situación, la devolvieron de nuevo a la cárcel.
Se dice que un águila velaba, cuando la mataron, su cuerpo hasta que la enterraron en las Catacumbas de Priscila, en donde hay en la actualidad una iglesia dedicada a su nombre desde el siglo IV.
En lo que respecta al arte, los pintores la plasmaron en sus cuadros como una joven mártir con un león o dos, una espada y un águila cerca de ella. Pintores como Farmer, Roeder y Tabor.
El león domado o domesticado a sus pies simboliza la caída del paganismo.
Sus restos se veneran en Roma. Un ejemplo claro de sacrificio por la fe en Cristo.
¡Felicidades a las que lleven este nombre!
"No hay soledad más triste y afligida que la de un hombre sin amigos, sin los cuales el mundo es desierto; el que es incapaz de amistad, más tiene de bestia que de hombre" ( Francis Bacon).