Historial de Catequesis

“ Eres un empleado fiel y cumplidor ”

Este “penúltimo” domingo del año litúrgico nos mete de lleno en la esfera religiosa escatológica; nos instruye y nos motiva a pensar en las últimas cosas de la vida, esas sobre las que no queremos hablar casi nunca, porque nos parece que no forman parte de nosotros mismos; como si fueran de otro mundo. Sin embargo, la liturgia nos recuerda que son del nuestro, de nuestra intimidad más profunda a la que debemos asomarnos con fe y esperanza.

“ ¡Que llega el esposo, salid a recibirlo! ”

La Lectura (Sabiduría 6,12-16): Abrirse a la sabiduría

La liturgia de este domingo, intenta marcar la pauta de lo que es la apertura al último destino del hombre y de la vida. Efectivamente, sin la sabiduría, que es la esencia de lo bueno, de la felicidad, de lo ético y estético, la vida perdería su hermosura y su dimensión escatológica (lo que la lleva más allá de la experiencia de la finitud y de la muerte). Por ello, ser sabio, en la Biblia, no es estudiar una carrera para aprender muchas cosas; no es cuestión de cantidad, sino de calidad; es descubrir constantemente la dimensión más profunda de nosotros mismo y de Dios. Para los hebreos, los enemigos de la fe en Dios no eran el escepticismo ni la incredulidad sino la adoración a los dioses paganos, meros productos de la imaginación humana descarriada.

“ Uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos ”

Iª Lectura: Malaquías (1,14b-2,2): Condena de la "religión" sin sentido

I.1.Malaquías, de donde se toma la Iª Lectura de hoy (1,14b-2,2), es más un libro de oráculos que un profeta, ya que la personalidad que subyace en el texto del último de los profetas nos muestra una dimensión difuminada de la actividad profética; de un tiempo mucho más tardío (480/460 a. C), aunque antes de la reforma de Esdras y Nehemías, tras lo que se hará callar a los profetas para siempre hasta el momento del Nuevo Testamento.